José González Medina condenado por violar a su esposa en Dos Hermanas (Sevilla) y posteriormente absuelto por el Tribunal Supremo, ha pedido una indemnización de 2,7 millones de euros por los daños morales ocasionados por haber perdido todo contacto con sus hijos durante los seis años que duró la causa.
Así lo ha anunciado Enrique Carrasquilla, uno de sus abogados, que ha afirmado que su cliente ha sufrido "una vulneración" de su derecho a la presunción de inocencia -al habérsele impedido ver a sus hijos "hasta que no finalizara el proceso penal"-, y que esto ha provocado que prácticamente "haya perdido" a sus dos hijos, uno de ellos ya mayor de edad.
Aunque se han propuesto numerosas alternativas para hacer viable el programa de visitas, el juzgado las ha rechazado todas y ha adoptado la decisión de cancelarlo definitivamente, por lo que Carrasquilla ha pedido para González una compensación "por responsabilidad patrimonial del Estado" de unos 2,2 millones de euros "por la ruptura con los hijos durante noventa meses", y 540.000 euros por violar el derecho al honor y la dignidad de éste.
Cinco años en ser juzgado
Según Carrasquilla, José González fue acusado de violación por su esposa en 2003 y hasta 2008 no fue juzgado por la Audiencia de Sevilla, que le condenó a seis años de prisión hasta que en noviembre de 2009 el Tribunal Supremo le absolvió libremente.
El abogado ha criticado que a partir de que la mujer interpusiera la denuncia, González fuera separado de sus hijos, entonces de 10 y 2 años, y que únicamente se le hayan puesto impedimentos para verlos, pues no fue hasta octubre de 2006 cuando se produjo el primer encuentro, donde incluso se puso "de manifiesto" que los menores podrían sufrir "un síndrome de alineación monoparental", al declarar que no querían ver a su padre.
Este hecho fue denunciado por los abogados de González ante el Juzgado de Dos Hermanas, que respondió "suspendiendo provisionalmente" el régimen de visitas a la espera de la resolución del procedimiento penal pendiente, por lo que, según Carrasquilla, no se le aplicó el principio de presunción de inocencia a su cliente, sino de "culpabilidad".
Sin relación con sus hijos
Todo esto ha provocado, ha afirmado el abogado, que González haya perdido la relación con sus hijos, el cual ha lamentado que actualmente sea "imposible" recuperar a su hijo mayor, pues acaba de cumplir la mayoría de edad y ya no puede regirse por el mismo sistema de visitas.
González, que ha declarado estar en tratamiento psicológico, ha dicho también que se ha sentido "abandonado" por el sistema judicial, y que todavía se le sigue tratando "como a un violador" a pesar de haberse demostrado su inocencia, aunque ha afirmado que lo que más le duele es haber perdido "lo que más quería".
Fuente: elmundo.es
Alberto y Alfonso