Microsoft lanza una nueva edición de Windows, bautizada como
Windows 8, que puede considerase como la más ambiciosa de la compañía desde la
presentación de Windows 95.
"Éste es el Windows con el que llegaremos a los
próximos 1.000 millones de usuarios", aseguró Steven Sinofsky, responsable
del producto, sobre el escenario del Pier 57 de Nueva York. Microsoft ha
celebrado varios eventos simultáneos en todo el mundo para la presentación de
esta nueva versión de Windows, que será compatible con más de 1.000 ordenadores
diferentes.
El nuevo sistema operativo supone un cambio significativo en
la forma de usar los ordenadores y tabletas. Atrás quedan los viejos elementos
gráficos y de interacción como el escritorio, la ventana, el puntero o el
tradicional botón de "Inicio". Para usar algunos programas, como
Office, seguirá siendo necesario acudir a ellos pero la mayor parte de la
interacción se realiza ahora en una interfaz más moderna y limpia bautizada como
'ModernUI'.
ModernUI es una colección de rectángulos y cuadros animados
que pueden mostrar información o fotografías y reorganizarse en la pantalla a
gusto de cada usuario. Proveen acceso directo a programas y servicios y, aunque
es posible desplazarse entre ellos con un ratón o un trackpad, están
optimizados para pantallas táctiles.
Los usuarios de Windows 8 podrán pasar al escritorio
convencional en cualquier momento e instalar aplicaciones de Windows 7, pero
para la nueva interfaz Microsoft ha creado una tienda de aplicaciones y juegos
propia, Windows Store, que estará disponible en más de 230 países.
La actualización a Windows 8 para usuarios de XP o Windows 7
costará 30 euros durante el periodo promocional (hasta finales de enero de
2013) y sólo 15 euros para equipos comprados a partir del mes de junio de este
año. El precio del sistema operativo, una vez finalizada la oferta, será de 60
euros para usuarios domésticos. Microsoft tendrá también ediciones para
empresas y grandes corporaciones con ligeras variaciones.