El Partido Popular ha ganado por vez primera las elecciones autonómicas en Andalucía, pero se queda muy lejos de la mayoría absoluta de 55 parlamentarios que le hubiera dado el gobierno de la comunidad. Con 50 escaños al 100% escrutado a las 23.54 del domingo, el PP tendrá una 'amarga victoria' en Andalucía porque el panorama que se dibuja en el horizonte es un más que probable pacto PSOE-IU que le garantizará la gobernabilidad a José Antonio Griñán.
Se trata de una situación inédita en la política andaluza. Si bien entre 1996 y 2004 hubo gobiernos de coalición (PSOE-PA), en esas dos legislaturas era el partido vencedor en las elecciones el que buscaba apoyos para forjar una mayoría parlamentaria. Ahora será distinto, porque PSOE e IU tendrán que entenderse para cerrarle el paso al triunfador en las urnas.